Las estrías son marcas lineales o sinuosas, blancas o rosadas/moradas, habitualmente largas y finas, que estéticamente afean nuestra piel. Aparecen sobre todo en el abdomen y los senos, pero pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo. En los varones aparecen también con frecuencia en espalda y hombros. También es muy frecuente que aparezcan en momentos concretos como el embarazo y el sobrepeso-obesidad, donde se somete la piel a distensión excesiva. Aparecen con frecuencia mayor en mujeres que en hombres. Si quieres saber qué son las estrías y por qué salen, vamos a contártelo de forma resumida en este post.
¿Qué son las estrías?
La piel tiene tres capas: epidermis (la más externa), dermis (la intermedia) e hipodermis (la más profunda). La dermis tiene tejido conjuntivo con abundantes fibras de colágeno y elastina, que le dan elasticidad a la piel.
Las estrías son realmente atrofias cutáneas del tejido conjuntivo de la dermis, que se ven externamente por transparencia a través de la epidermis. Traducen por tanto un estado patológico de ese tejido conjuntivo, que presenta una fibrosis excesiva como respuesta a la rotura y mala calidad de las fibras de colágeno y elastina. Por lo tanto, las estrías podríamos decir que son cicatrices del tejido conectivo de la dermis, que es la capa media de la piel.
¿Por qué salen estrías?
Las causas que desencadenan la aparición de las estrías y pueden abocar a un cuerpo estriado son varias, entre ellas las más frecuentes:
Distensión mecánica
Existen factores mecánicos que producen distensión o estiramiento excesivo de la piel, como el embarazo, el sobrepeso o la obesidad, y los cambios bruscos de peso. La distensión puede llevar a la rotura de las fibras de la piel y la aparición de las estrías. Cuanto más severo y prolongado sea el estiramiento, más probabilidad de desarrollar estas marcas.
Predisposición genética
Hay factores genéticos que predisponen a fragilidad en la piel y por tanto a que salgan estrías de forma más habitual.
Disbalances hormonales
Las situaciones de alteraciones hormonales con aumento de estrógenos, característicos de períodos como el embarazo y la adolescencia, también se ha demostrado que predisponen a la formación de las estrías.
Tratamientos farmacológicos
Algunos medicamentos, como los corticoesteroides favorecen la aparición de estrías, que suelen ser violáceas. En casos de tratamientos crónicos con consumo prolongado, hay altos niveles de cortisol, el cual altera la síntesis de colágeno.
Sindrome de Cushing
Esta enfermedad cursa con altos niveles de cortisol, por lo que, igual que el tratamiento crónico con corticoesteroides, altera la síntesis de colágeno. Las estrías que aparecen en los pacientes con síndrome de Cushing son característicamente violáceas o púrpuras.
Tipos de estrías
Habitualmente se dividen las estrías según su aspecto y su color en rojas o moradas y blancas o nacaradas. Realmente estos colores corresponden al estado evolutivo en el que se encuentra la estría.
Estrías moradas y rojas
Son las estrías más incipientes, las que se acaban de formar. Su color morado o rojo traduce que aún están vascularizadas, a la dermis le llega sangre que la nutre aún. Podría decirse que son las estrías jóvenes. Por su color oscuro son las estrías más visibles y anti estéticas. Sin embargo, al ser más incipientes responden mejor a los tratamientos que las estrías blancas.
Estrías blancas
En este caso se trata de estrías ya maduras y cicatrizadas, en las que la dermis ya no está vascularizada, de ahí su color blanco o nacarado, al no tener sangre. Este tipo de estrías ya son más difíciles de tratar. Podríamos decir que son las estrías más viejas.
Las estrías pueden llegar a producir un gran impacto emocional, ya que tienen un efecto muy negativo desde el punto de vista estético, sobre todo cuando son muy numerosas. Un cuerpo estriado puede ser causa de complejos y problemas de autoestima. Hay personas que ven mermada su sociabilidad, ya que temen situaciones en las que las estrías puedan ser visibles, como la playa o piscina, gimnasio, y que evitan ropa que muestre las zonas afectadas. Incluso en algunas personas se ve afectada la vida íntima y las relaciones sexuales.
Por tanto, no se debe tomar a la ligera este problema, y se debe consultar a un especialista dermatólogo o cirujano plástico cuando aparezca. Los tratamientos más adecuados deberán individualizarse según la edad, localización, causa y tipo de estrías.